jueves, 28 de octubre de 2010

Dios nos llamó a santificación.

1ra. TESALONICENSES 4:1 Por lo demás, hermanos, os rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera que aprendisteis de nosotros cómo os conviene conduciros y agradar a Dios, así abundéis más y más.
4:2 Porque ya sabéis qué instrucciones os dimos por el Señor Jesús;
4:3 pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación;
4:4 que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor;
4:5 no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios;
4:6 que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado.
4:7 Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación.

No hay comentarios: